Una separación en la familia es un tema muy delicado en el que una pareja decide desvincularse emocional y físicamente para lograr una tranquilidad personal en sus vidas. Esto no significa dejar de lado el rol de padres que ambos comparten, pero sí adaptarse a los cambios. Te daremos los mejores consejos para sobrellevar una separación y que no afecte a tu niño.
- Explícale qué es la separación
Habla claramente y trata de explicarle lo que es una separación. Hazlo de forma simple y sin culpar a nadie.
- Respeta la rutina de tu niño
No intentes cambiar los hábitos de tu niño de la noche a la mañana a causa de la separación. Lo ideal es que no haya cambios en cuanto a domicilio, amigos, nido, horarios, etc. Recuerda que los niños no tienen la culpa del divorcio.
- Habla solo de lo positivo
Conversa con tu pequeño acerca de los cambios positivos que vendrán. Dile a tu pequeño que seguirá viendo a sus dos padres porque lo aman y que siempre será así aunque no vivan juntos.
- Facilita la relación de tu pequeño con ambos padres
Respeta y colabora siempre con el horario de visitas o salidas y sé flexible cuando sea necesario. Así tu niño pueda disfrutar por igual de su papá y de su mamá y te lo agradecerá.
- Fomenta lazos de amor y respeto
Demuestra siempre que el amor por ellos sigue siendo el mismo y que eso no cambiará. Aunque tu pequeño viva solo con uno de sus padres, él debe saber que los dos lo aman por igual aunque ya no vivirán juntos.
- Comparte responsabilidades
Ambos padres tienen que estar siempre presentes en cuestiones relacionadas con la educación, salud y otras necesidades del niño. Compartir estas responsabilidades hará que el niño se sienta amado y apoyado siempre.