Saltar al contenido

Descubre todo sobre el parto y sus etapas



Con el fin de mantenerte siempre bien informada, queremos compartir contigo más acerca del parto y sus etapas. Consideramos que es vital que esperes este momento con conocimientos básicos que te ayuden en ese gran día, sobre todo, si estás a punto de tener a tu primer bebé. Cada mujer es diferente, pero todas tienen la fuerza y la actitudde poder convertirse en unas excelentes madres.

El parto se divide en tres etapas:

  • Trabajo de parto:

Esta etapa comienza con las primeras contracciones que poco a poco hacen que el cuello uterino se dilate totalmente y llegue a medir, aproximadamente, unos 10 centímetros. Las contracciones pueden ser suaves o fuertes de acuerdo a cada mujer. Esta etapa dura en promedio dos horas.

  • Empuje y nacimiento:

Esta fase es quizás la más importante ya que aquí sucederá el descenso y nacimiento de tu bebé. Al comienzo sentirás presión y empezarán las contracciones lentas, tú deberás pujar de forma prolongada para que ayudes a que su cabecita baje y por fin pueda nacer. Esta etapa dura de 1 a 2 horas.

  • La eliminación de la placenta:

Luego del nacimiento, comienzas a expulsar la placenta que contenía tu útero. Este proceso demora de 10 minutos a 1 hora de acuerdo a cada mujer y el tipo de embarazo. Luego, deberás estar en absoluto reposo según las indicaciones que te de el médico.

Conoce los diferentes tipos de parto

Para ti que te encuentras cada vez más cerca de poder acariciar a tu bebé, hemos traído esta información sobre los diferentes tipos de parto que existen y que podrás escoger, siempre y cuando tu médico y tú lo crean conveniente. Cada alternativa tiene sus peculiaridades pero todas son aceptadas por los especialistas.

  • Parto normal: Este es el más común. Es el que se realiza normalmente en los hospitales donde se aplica anestesia a la madre y el bebé nace a través de la vagina. El dolor se controla a través de medicamentos y se utilizan instrumentos, en algunos casos, como el fórceps.
  • Parto natural: No se utiliza ningún medicamento, instrumento, ni se realiza una cirugía. Si la madre y el bebé cuentan con buena salud, el médico analiza los latidos del bebé y la frecuencia de las contracciones para saber cuál es el momento adecuado para inducir al parto. Como es un parto natural, no se aplica anestesia pero se controla el dolor mediante técnicas de respiración.
  • Parto en el agua: Alternativa recomendada por ser muy relajante pues se realiza bajo agua caliente (37 grados centígrados que es la temperatura del organismo humano). Se realiza con la guía de un especialista que te supervisa y ayuda a llevar el parto y además es una técnica cómoda tanto para ti como para el bebé.
  • Parto por cesárea: Se realiza una cesárea cuando por ejemplo tu bebé se encuentra en posición transversal o con los pies hacia abajo o cuando existen infecciones en el cuello del útero u otras características que el médico considere pueden ser de riesgo. Se hace entonces un corte en el abdomen, previa anestesia.

¡Pronto llegará el gran día, prepárate desde ya y alista el bolso del bebé con todo lo necesario para el día del parto!

¿Estás pronta a dar a luz?

Esta es una de las interrogantes que muchas mamás se plantean cuando se encuentran en las últimas semanas del embarazo, sobre todo las primerizas. ¿Cómo sabré si falta poco para el momento del parto, qué sentiré y qué debo hacer? Para que te encuentres más tranquila, compartimos contigo cuáles son los síntomas indicadores de que ha llegado el momento de recibir a tu engreído.

Algunos partos se adelantan o se atrasan con respecto de la fecha prevista por el médico, pero generalmente, las mamás dan a luz entre la semana 38 a la 41. En este lapso de tiempo deberás estar más atenta e informarle a tu médico de inmediato si es que sientes claros síntomas de que el parto se acerca, como los siguientes:

  • Una fuerte presión en el pubis, ubicado en la zona baja del abdomen. Es una presión similar a los cólicos menstruales.
  • Punzadas y sensación de vacío en la zona vaginal.
  • Expulsión del tapón mucoso (flujo transparente y espeso que mantiene sellado el cuello del útero).
  • Flujo de sangre.
  • Rompimiento de fuente (pérdida del líquido amniótico).
  • Diarrea repentina (solo sucede en algunos casos).

Estos síntomas aparecen solamente en las últimas semanas del parto. Si sientes alguno, infórmale a tu médico rápidamente para que seas trasladada al centro de salud más cerca de tu casa. ¡Alégrate, cuando menos lo esperes llegará tu bebé y serás la madre más feliz del mundo!

Motivos por los que se realiza una cesárea

Existen algunos casos en los que es preferible realizar una cesárea a un parto normal para salvaguardar tu salud y la de tu bebé. Aquí podrás conocer las razones principales por las que se hace necesaria esta intervención.

  • Embarazos múltiples:

Los médicos recomiendan practicar una cesárea a las madres que han tenido uno o más bebés, de acuerdo a una evaluación previa y preguntas acerca de su anterior embarazo.

  • Dificultades en la posición del bebé:

A veces hay algunas situaciones que podrían dificultar el parto como la ubicación del cordón umbilical u otras cuestiones que solo el médico puede determinar.

  • Placenta previa:

La placenta previa es una condición en la que la placenta se encuentra debajo del bebé y bloquea la salida del bebé a través del cuello uterino. Este caso obliga la realización de una cesárea.

  • Enfermedades de transmisión sexual:

Algunas enfermedades de transmisión sexual pueden ser transmitidas al bebé durante el parto convencional. Si la madre estuviera infectada con algún virus, el médico indicará que es necesario hacer el parto mediante cesárea.

Estas son las razones más comunes por las cuales se debe realizar una cesárea de forma obligatoria. No olvides que solo podrás tomar una decisión tras consultar con tu médico de confianza, quien podrá saber qué tipo de parto será el más adecuado para ti y tu bebé.